Néstor Letelier conocido como el “tata“, es un profesor de matemática de 85 años, a quien los alumnos del colegio King School Cordillera, ex Humboldt, le realizaron un homenaje a través de un vídeo compartido en la red social Facebook. Donde destacaron la gran labor que cumple este docente en medio de la emergencia sanitaria, entendiendo que a su avanzada edad a debido sumarse y adecuar su forma de educar utilizando distintas plataformas digitales.
El tata o tatita como con cariño le dicen sus alumnos, comenzó realizando sus primeras clases el año 1952, y hoy a través de una vídeo llamada nos confiesa que no trabaja por necesidad, sino que lo hace por gusto ya que no imagina una vida lejos del aula. “Siempre les digo a mis alumnos que se cuiden porque hay que ganarle a este bicho (coronavirus), yo de verdad los quiero, los necesito, paso más tiempo con ellos que con mi familia”, agregó Néstor.
Quien además cuenta que su meta es llegar a los 100 años, pero bien, sin ser una molestia para sus hijas, ni para sus nietos. “Soy viudo y vivo solo, no quiero molestarlos, aún soy autovalente”. Además, menciona que vivió mucho tiempo en Puente Alto, pero hace un tiempo debido a la pandemia sus hijas decidieron llevarlo a vivir a Maipú ya que él no quiso ir a vivir con ninguna de sus cuatro hijas, así que prefirieron tenerlo más cerca para poder cuidarlo.
Homenaje
Los estudiantes del taller de televisión del colegio, “Edu King Tv”, compartieron un vídeo en su cuenta de facebook donde destacan el esfuerzo que este profesor le ha dedica a cada una de sus clases, el que suma varias reproducciones y ha sido altamente compartido incluso por ex alumnos quienes dejan ver, el cariño hacia el tata.
Mira el vídeo completo aquí.
https://www.facebook.com/EduKingProducciones/videos/3011837332185564
Nueva Modalidad
Por otra parte, Néstor señala que no ha sido tarea fácil adecuarse a la actual modalidad de clases, “es bien difícil, yo no soy para nada tecnológico, nunca me gustó. En los años sesenta había unos computadores enormes que le llamábamos la picadora dónde si cometías un error te demorabas mucho en corregirlo, por eso siempre preferí el papel y el lápiz. Ahora tengo un computador que es de bolsillo en donde me enfrento a una cantidad de teclas que no sé cómo usarlas, hay algunas que tienen más de un uso”.
“He tenido harta comprensión por parte de las autoridades del colegio y además hay colegas (profesores) que me han ayudado a compartir las guías con los alumnos”. En este contexto, destaca que hay poco compromiso por parte de los estudiantes, ya que muchos aparecen con los micrófonos apagados y no participan de la clase, “no sé si están atentos a la clase o están realizando otra actividad”.
Cabe señalar, que el tata es hijo de quien fuera profesora pero él jamás imaginó serlo también, ya que al terminar su ciclo escolar no quería entrar a la universidad, quería trabajar, sin embargo su padre lo incentivó a estudiar. Finalmente, decidió realizar todas las pruebas en la universidad Católica para entrar a arquitectura, sin embargo un día acompañó a sus padre al Pedagógico y tuvo la incertidumbre de preguntar de qué se trataba la carrera de pedagogía en matemáticas y de casualidad portaba todos sus documentos y se matriculó.
Néstor nos cuenta que no sabe porqué tomó esa decisión pero que no se arrepiente para nada, de lo contrario, dice que fue una excelente casualidad. Tiempo más tarde se enteró que no había quedado para arquitectura.
Por último, este docente con 68 años de experiencia en el aula, cierra diciendo que él cada vez que puede les aconseja a sus alumnos que “hay que ser de esas personas que actúan porque esos son a los que les va bien, los demás por fuerte que suene son puros mediocres”.