David Allendes y Daniela Espinoza, son un joven matrimonio, juntos conforman este innovador emprendimiento, él cual puede llevarse a cabo, gracias a una impresora 3D.
La cesantía de uno de los jefes del hogar fue una de las razones de la creación de esta pyme, funciona como apoyo complementario del trabajo publicitario que realiza la familia: “Nos dimos cuenta que muchos ofrecen impresiones 3D, pero para marcar la diferencia decidimos realizar figuras con pintura mucho más detallada y replicando la original más que en bruto” declaran.
Reinventarse no ha sido fácil, tras el estallido social les ha costado tener un sueldo estable, y quedaron de brazos cruzados, luego, la llegada de la pandemia agravó el desarrollo de impresiones.
De a poco llegó la oportunidad de ingreso económico, “nos hemos dedicado a reinventarnos de acuerdo a las necesidades actuales, como las mascarillas”, comenta David.
Mascarillas, protectores faciales y alcohol gel han sido uno de los artículos de primera necesidad que han quedado sin stock en farmacias y supermercados, debido a la alta demanda, sus precios en ventas por redes sociales alcanzaron un valor de $9.000 por una mascarilla según cifra obtenida de reportaje realizado por CIPER.
“Vimos qué hay un abuso en el precio de las ventas de este producto, por lo tanto, pensando en el bolsillo de las personas hemos creado una al alcance de todos los bolsillos” afirman los emprendedores.
El matrimonio trabaja día y noche en la creación de figuras y mascarillas 3D, y en la difusión de su emprendimiento en redes sociales.
La familia Allendes Espinoza, cuenta con despacho a domicilio en su comuna de residencia, retiro en su hogar y envíos a todo Chile. los cuales son programados semanalmente, para tomar medidas de higiene necesarias. “Confeccionamos protectores faciales a un valor accesible y su compra nos genera ingresos a nuestro hogar”.
Impresoras 3D Chile cuenta con su plataforma web, si desea realizar su pedido puede ingresar a Instagram de Impresiones 3D Chile.